En octubre de 2015, tuvimos la oportunidad de conducir un Volkswagen T4 California Exclv. alrededor de Andalucía, en respuesta a la invitación de Flamenco Campers.

Nuestra experiencia será narrada de la siguiente manera:

  • En la primera parte de la gira, después de nuestra llegada a Málaga, partiremos hacia Cádiz.
  • La segunda parte nos llevará a los toques de luz de Córdoba y Granada.
  • En la parte 3 explicaremos todos los detalles sobre el alojamiento.¡Entonces empecemos! ¡Un increíble recorrido por las carreteras y caminos de Andalucía nos espera!

Como la distancia entre Dortmund y Andalucía es de unos 2.000 km, el viaje comenzó en un vuelo de Ryanair. Como habíamos reservado con antelación, el vuelo no solo tenía un precio razonable, sino que también era muy conveniente ya que abordamos directamente desde nuestra ciudad.

Además de los asientos angostos esperados, el vuelo se convirtió en una experiencia realmente agradable, y aterrizamos en Málaga a tiempo.

Una vez que hemos llevado nuestro equipaje (¡15 kg para dos personas!), Tuvimos tiempo de familiarizarnos con la alta temperatura del Málaga antes de que Gonzalo, el propietario de Flamenco Campers, se apresurara a saludarnos con alegría.

Después de varios correos electrónicos y un encuentro cara a cara en el Caravan Salon en Düsseldorf, tuve la oportunidad de verlo nuevamente en el sur de España. Solo nos llevó 10 minutos llegar a la base de Flamenco Campers, donde “Lola” nos recibió calurosamente.

¿Por qué decidimos elegir este modelo con precisión? Te lo haremos saber en un próximo artículo.

Gonzalo nos proporcionó una variedad de accesorios, como sillas de camping y guías, y también nos preguntó sobre nuestros planes e intereses. Sobre la base de esta información, trabajamos juntos para desarrollar las medidas más adecuadas para hacer frente a lo largo de una gira de 9 días.

Hubo un buen número de consejos sobre la ruta y los campings que deben tenerse en cuenta. Como podíamos manejar con equipaje muy pequeño, le agradecimos a Gonzalo por haber guardado todo el resto de nuestro embalaje masivo dentro de sus armarios.

Estábamos ansiosos por hacer la ruta con Lola y, después de un par de intentos para controlar los engranajes, los frenos y la dirección de nuestro nuevo vehículo, finalmente partimos.

Sin embargo, la primera parada fue muy cerca: ¡en un Lidl, para almacenar provisiones!

Llegamos rápidamente a la carretera costera y cruzamos Marbella. Habíamos oído hablar de la ostentosa Marina de Puerto Banús y, entonces, decidimos que un puerto tan impresionante hubiera merecido una visita.

De todos modos, giramos hacia el este detrás de Marbella en dirección a una carretera sinuosa de 70 kilómetros de longitud y después de tanta dirección y tarea de cambio, Lola y yo nos convertimos en un equipo inseparable.

Poco antes del anochecer, llegamos al campamento de Ronda. Ronda City, altamente recomendado y apreciado por cada persona que conocimos, estuvo a la altura de nuestras más altas expectativas. Llenos de emoción, nos preparamos para degustar las primeras tapas.

A la mañana siguiente, estábamos en nuestro paseo a la ciudad, lo que nos llevó unos 20 minutos. Pasamos por la muralla de la ciudad y luego fuimos cuesta arriba hacia el centro de la ciudad.

A primera vista, Ronda parecía una ciudad antigua fascinante en la ladera de una colina, pero luego, cuando llegamos al “Puente Nuevo” (“Puente Viejo”, construido a fines del siglo XVIII), pudimos entender por qué tantos visitantes de todo el mundo vienen a ver esta típica ciudad andaluza.

La ciudad se encuentra a 723 metros sobre el nivel del mar. El casco antiguo de influencia morisca está situado en una meseta rocosa escarpada redonda. El distrito moderno y el casco antiguo están separados por un cañón de 100 metros de profundidad.

Aunque el puente, su atracción principal, invita a tomar fotos desde todos los ángulos imaginables posibles, también puede descubrir muchos otros lugares fascinantes: plazas con encanto arquitectónico, iglesias, calles estrechas, restaurantes, cafeterías y tiendas típicas.

No debe dejar de mencionarse la plaza de toros (“Plaza de Toros”) construida entre 1779 y 1785, donde surgieron las reglas de los toros y cuya arena se puede visitar por una pequeña tarifa de admisión.

Ronda nos ofreció un comienzo impresionante en nuestra gira por Andalucía. Después del viaje a las montañas, nos dirigimos hacia el mar. En el camino de regreso a la costa, y después de más de 1,000 curvas, aún hicimos algunas paradas.

El primero fue el “Castillo de Castellar”, un castillo construido en tiempos de los moros transformado en un hotel, apartamentos y tiendas de artesanías.

El mismo camino sinuoso nos llevó al estacionamiento. Lola hizo un esfuerzo inimaginable y, después de subir al castillo, fuimos recompensados ​​con un lugar muy especial desde donde descubrimos hermosas casas y fantásticas vistas sobre el parque nacional y la enorme roca de Gibraltar.

Un cartel que ofrece recorridos de pádel en uno de los lagos de los alrededores nos tentó a disfrutar de esa experiencia. Si tuviéramos más tiempo …!

Sin embargo, tuvimos tiempo de dar un paseo por las calles curvas del castillo antes de regresar al estacionamiento.

Nuestro destino era la costa, más precisamente Tarifa, el punto más meridional de Europa.

Gonzalo nos llevó a un punto de ventaja justo antes de Tarifa, desde donde podíamos tener una vista maravillosa de la costa opuesta de África.

Viniendo desde el este, sin embargo, no es posible girar a la izquierda en el estacionamiento. En mi opinión, esta maniobra vale la pena en un clima despejado como un “desvío” de una sola vez.

Como conclusión clara: los 9 días en Andalucía también son demasiado cortos.

Llegamos al campamento en Tarifa antes de que oscureciera. Como pasamos un día muy ocupado y lleno de impresiones de miedo, optamos por una cena relajada en la pizzería local.

Para visitar Tarifa a la mañana siguiente, dimos un paseo por la playa … ¿Nadie nos había dicho que esto tomaría alrededor de media hora? De hecho, tenía unos 6 kilómetros de largo, así que nos llevó más de una hora. ¡Además, hubo un momento impactante cuando nos dimos cuenta de que el agua no solo estaba a nuestra derecha, sino también a nuestra izquierda …! Pero como supimos más tarde, era una laguna.

Para jugar seguro, llegamos a un terreno a través del agua … ¡para descubrir que estábamos húmedos hasta la ropa interior! Perfecto para un agradable paseo por la fortaleza de los surfistas: Tarifa.

Debe haber parecido bastante gracioso, cuando todavía estábamos por mucho tiempo de pie en la playa tratando de secarnos los pantalones usando solo el sol y el viento.

Como esto fue razonablemente exitoso, paseamos por el paseo de la playa, que no encontramos especialmente atractivo, pero donde descubrimos algunos agradables bares de playa y cafés.

Tarifa no es solo un punto de encuentro para los kitesurfistas que encuentran el lugar como un área ideal, sino también para los “nómadas digitales” ̶ personas que trabajan en línea.

El casco antiguo de Tarifa es realmente agradable y tiene un ambiente agradable, con gente de todas partes del mundo. Optamos por el Tapas Bar “El Lola” ̶ ¡qué apropiado! Esto se puede encontrar en Calle Guzmán el Bueno, 3.

Más tarde en la tarde nos encontramos con Johannes, un hombre alemán que opera un llamado “espacio de coworking”. Johannes también es autor de una buena guía de Tarifa.

Al atardecer nos sentamos en el bar de la playa de Papagayo y pedimos algunos cócteles. Aproximadamente a las 8 p.m., cuando pensamos que era hora de cenar, recibí una invitación de Stefan, un hombre que vive en un campingbus y que maneja una compañía de 20 empleados.

Ahora es probable que diga: “¿Eso fue todo?”

Aunque no conocía personalmente a Stefan, aceptamos reunirnos en un restaurante de carnes con ocho personas, todas las cuales operan desde y hacia Tarifa. Formamos un grupo internacional con historias emocionantes para contarnos entre nosotros.

Después de la segunda noche tranquila en Tarifa, era hora de continuar nuestro viaje. Todos nosotros teníamos una idea fija en nuestras mentes: “¡Volveremos!”

Condujimos hacia el oeste a lo largo de la costa no lejos del punto de visita más cercano: los sitios arqueológicos romanos “Baños de Claudia” y su museo.

Incluso si no está tan interesado en la “observación de piedras”, le recomendaría el viaje a Bolonia.

The museum is in fact an impressive architectural design and all the complex is situated in a beautiful bay with magnificent beaches to relax, swim or climb dunes.

All those who decide to visit the excavations will have the chance to learn a lot about the Romans: its fantastic buildings and infrastructure at that time.

In the future course of the coast we fell by chance in the area between Zahara de los Atunes and Bahía de la Plata.

Stunning houses, partly in classical style and partly in Bauhaus, are spread in the hills near the sea for anyone who appreciates the real zest for living.

On the way towards our destination –Cádiz–, we visited one of the famous “white towns” of Andalucía: Vejer de la Frontera, whose central square “Plaza de España” is well worth a visit.

We had an excellent lunch at “Califa Express”, an Arab restaurant right on the Plaza.

Por la tarde llegamos a Cádiz. Esta supuestamente la ciudad más antigua de Europa está situada en un promontorio. Para llegar al casco antiguo, debe conducir por una carretera recta que atraviesa la ciudad nueva menos atractiva.

Después de buscar algo por un rato, encontramos un espacio de estacionamiento para Lola en un gran estacionamiento justo en el agua, que tenía un precio razonable. A partir de ahí, salimos a dar un paseo por Cádiz y debemos admitir que nos sentimos un poco asustados caminando por estas estrechas calles llenas de rincones.

El inusual ritmo diario español fue evidente en las numerosas y animadas tiendas que se abren hasta la tarde. Cuando encontramos por primera vez las calles comerciales, estaba oscureciendo, y nuestra visión de este escenario urbano estaba cambiando progresivamente para mejor.

Lamentablemente, ya era demasiado tarde para visitar el mercado en la ciudad, por lo que planeamos visitar el primer mercado por la mañana. Fuimos llevados a lo largo de la atmósfera cautivadora antes de ir al supermercado para conseguir suministros para la cena.

Previamente habíamos elegido un lugar de estacionamiento en el puerto con la intención de capturar una vista privilegiada de la bahía de forma gratuita.

¿Por qué fallamos en encontrar la paz deseada …? Te lo haré saber en los siguientes artículos.

Mientras tanto, continuaremos nuestro itinerario hacia Córdoba y Granada.

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